Una rosa blanca,
por la perdida pureza de mi alma.
Una rosa roja,
por la pasión que infundiste en mí.
Una rosa rota,
que es como dejaste mi corazón.
Una rosa marchita,
marchita como el amor que alguna vez sentí por ti.
Una rosa negra,
negra como el olvido y la desesperación,
como el llanto y la pena
que habitan en mi.
Una rosa muerta,
ya que el dolor me ha matado de a poco.
Los ángeles no matan,
y tú me has matado
con tu maldito amor
el alma me has destrozado.
Ya no eres un ángel,
mi ángel.
eres tan solo un demonio más
de mi lista de errores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario