…me hallaba sentado en ese viejo árbol caído,
del color del mármol por las tantas lágrimas derramadas sobre él,
oyente solitario de las penas de un joven lobato que aullaba a la luz de la luna.
Solo en ese desierto lago, libre de vida,
podía yo recordar los tantos dolores del pasado,
agazapado y arrodillado junto a mi amigo,
el golem de sal caído.
del color del mármol por las tantas lágrimas derramadas sobre él,
oyente solitario de las penas de un joven lobato que aullaba a la luz de la luna.
Solo en ese desierto lago, libre de vida,
podía yo recordar los tantos dolores del pasado,
agazapado y arrodillado junto a mi amigo,
el golem de sal caído.
Monólogo de un titan caido
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